Cuando camines por tu Ciudad,
recuerda que lo hicimos juntos.
Que caminabamos tomados de la mano
sin perdernos detalles y atenciones
personales.
se encontraban mientras
nos besabamos, con la sana intención
de amarnos para siempre.
Pero nada en el amor, parece eterno
porque hoy te escribo a la distancia
sin tener la certeza de ser correspondido.
Autor Nestor Salgado